Hispanos y Ecología
Cada vez es mayor el interés de la comunidad hispana en Estados Unidos por temas ecológicos, participando activamente en iniciativas de todo tipo. Esta es la razón de que se estén impulsando programas enfocados hacia los hispanos para despertar aún más y canalizar esta conciencia medioambiental y hacerlos partícipes.
En Denver, Colorado, grupos comunitarios, agencias gubernamentales y empresas privadas incluyen de forma creciente y con éxito a los hispanos en sus programas, por ejemplo, en el Greenprint. El hecho de que muchos de estos programas se hayan simplificado y que los hijos de inmigrantes estudien temas ecológicos en las escuelas, que luego comparten en casa con la familia, son razones que explican este aumento del interés.
En el ámbito empresarial también se deja notar la huella hispana, por ejemplo, la presencia latina en una exposición tan importante como Earthworks Expo, crece cada año. Proyectos de negocios enfocados no sólo a generar riqueza sino a cuidar el medio ambiente con iniciativas como la reforestación de áreas sensibles. Algo que permite eliminar el carbono que generamos y alivia el efecto del calentamiento global. Así, una parcela de 20 hectáreas con 20.000 árboles reforestados captura aproximadamente la misma cantidad de dióxido de carbono (CO2), unas 9.000 toneladas, que genera como media una típica familia en Estados Unidos durante toda su vida.
La concienciación y divulgación de los temas ecológicos están en la base de este cambio de actitud de millones de personas, que ven la necesidad de proteger nuestros ecosistemas sin que eso implique renunciar al sistema de producción capitalista. Porque no son incompatibles en absoluto, como algunos sectores e ideologías se han empeñado en transmitir erróneamente, sólo es necesario adoptar nuevos hábitos de consumo y producción, de generación de energía y de protección hacia el entorno natural. Una nueva mentalidad para una nueva época. Los conocimientos y no los prejuicios están permitiendo que cada vez más gente entienda que respetar el medio ambiente de forma activa no significa adoptar planteamientos radicales ni extraños, que no es un sacrificio sino todo lo contrario, que implica una vida más sencilla y natural, más feliz para las personas, más racional en nuestras relaciones con el entorno y con los demás, y también más beneficioso desde el punto de vista económico. Porque los beneficios son inmediatos en salud, economía personal y en calidad de vida, así como el impacto de un comportamiento más ecológico también resulta más duradero y beneficioso para nuestro entorno, promoviendo la conservación.
La comunidad hispana, con el peso de una población en crecimiento e influencia, tiene mucho que decir en la implementación de programas de respeto medioambiental, como el uso de paneles solares, el reciclado de residuos, de divulgación ecológica, el uso prudente del agua y, en general, de una vida más saludable y menos artificial.
Todos los estudios sobre el tema demuestran la especial sensibilidad de los hispanos hacia el medio ambiente, de ahí que los programas dirigidos hacia ellos sean algunas de las mejores herramientas para hacerlos partícipes y defender la naturaleza. Que estas campañas de divulgación sean bilingües, en inglés y en español, es básico para el éxito de las mismas. Como lo es transmitir un mensaje claro acerca de la importancia de adoptar hábitos de vida saludables, mediante pequeños cambios de comportamiento, dirigidos hacia el respeto ecológico y la pervivencia de un entorno natural sano y no contaminado en el que todos podamos vivir, incluidas las generaciones venideras y los millones de personas que habitan un planeta sometido ya a demasiadas agresiones. Un planeta en el que las especies animales y vegetales mantengan sus espacios protegidos de la acción del ser humano.
El desafío de promover el respeto ecológico ha encontrado en la comunidad hispana un recibimiento entusiasta, algo que está consiguiendo que se incrementen hábitos más sanos y respetuosos en la sociedad. Tanto desde el ámbito de la divulgación, la espiritualidad, los hábitos de vida, la justicia ecológica en un contexto cristiano o desde el mundo empresarial y económico, la concienciación medioambiental latina está ayudando ya a conseguir una protección más activa de nuestros tesoros naturales y también una vida más natural, equilibrada y feliz.