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Grandes Series de TV Clásicas


A lo largo del tiempo se han emitido series que han impactado a la audiencia de forma extraordinaria y han dejado huella en la memoria.
Series como Bonanza, La casa de la pradera, Holocauto, Raíces, Hombre rico, hombre pobre, Kojack, Colombo, Los hombres de Harrelson, Mash, Star Strek, Misión Imposible, Dallas, Fama, V, o más recientemente: Perdidos, House, Deadwood, Band of Brothers (Hermanos de Sangre), Los Soprano, West Wing (El Ala Oeste de la Casa Blanca), Friends o CSI.
Series con gran calidad que han marcado la historia de la Televisión. Revisemos sólo
algunas de ellas.

La familia Monster (1964)
Inspirada en las antiguas películas de terror, nos mostraba una
familia muy particular formada por un Frankestein de cabeza de familia,
una vampira como su mujer, un abuelo vampiro, un hijo hombre lobo y una hija humana.
Durante dos temporadas se sucedieron las peripecias, provocadas por la adaptación de la familia a una sociedad que no
los comprendía y por la tendencia de meterse en líos de Herman Monster.

Buck Rogers (1979)
Esta serie lo tenía todo para triunfar, un protagonista que nada tenía que envidiar a Michael Knight, una protagonista atractiva, ciencia ficción y mucha comedia.
Inspirada en un cómic 1928, el personaje de Buck Rogers pasó del tebeo a los seriales radiofónicas para más tarde dar el paso a la televisión, la gran pantalla y luego a los videojuegos.
Duró apenas dos temporadas, donde el atractivo residía en el choque cultural entre un Buck Rogers que se quedaba congelado en una nave espacial en 1987 y la sociedad del 2419 donde despertaba.

El espantapájaros y la señora King (1983)
El guión giraba en torno a la señora King, protagonizada por la ex-angel de Charlie, Kate Jackson; una ama de casa viuda y con dos hijos que ayudaba en sus ratos libre al espía Bruce Boxleitner (Babylon 5), a resolver sus casos.
El éxito se prolongó durante varias temporadas entre 1983 y 1987, donde la tensión sexual se percibía en cada capítulo.

La casa de la pradera, Los Hombres de Harrelson, y Raíces, tres series icono de su época, que lograron audiencias millonarias, combinando historia, drama, y acción.

El gran héroe americano (1981)
Una de las series clásicas de la infancia de millones de telespectadores, que incluía grandes dosis de humor, anticomunismo y patriotismo.
La historia nos contaba las peripecias de un superhéroe que pierde las instrucciones de su traje especial con poderes, entregado por unos extraterrestres, y que tenía grandes dificultades para volar y aterrizar, con una acusada tendencia a meterse en líos.
Le acompañan un agente del FBI y Connie Sellecca, que se haría famosa por la serie Hotel.

Twin Peaks (1990)
Kyle MacLachlan como agente Cooper y Sheryl Lee como Laura Palmer, hicieron historia en la televisión con este relato de misterio.

Perdidos (2004)
Una de las series que ha suscitado la enorme pasión actual por las series de televisión, con un guión complejo y hábil, un amplio reparto coral, y una gran capacidad para mantener en tensión al espectador de forma inteligente con situaciones de difícil explicación.
La historia de los supervivientes de Oceanic, próxima a terminar, ya es un clásico.

House (2004)
El cínico, jocoso, mordaz, descarado, atormentado, y genial doctor House, ha sido otro de los grandes descubrimientos de la pequeña pantalla. Una fuerte personalidad combinada con casos médicos complejos, han seducido a la audiencia de todo el mundo.
Otra joya en el género de las series de TV, con planteamientos innovadores e historias humanas y creíbles, basadas en casos reales.

Deadwood (2004)
Otra de las maravillas que podemos ver en TV. Calidad y cuidada puesta en escena, realismo, guiones magníficos e interpretaciones únicas.
La serie narra el nacimiento de Deadwood en 1876, un pueblo minero real, de la época de la búsqueda de oro en Estados Unidos. Destaca, por supuesto, la gran interpretación de Ian McShane como propietario del salón, un hallazgo, que imprime carácter a cada capítulo.
Posiblemente una de las cinco mejores series de todos los tiempos.

Band of Brothers (Hermanos de Sangre), 2001.
Otra de las cinco mejores. Serie de 10 capítulos de la cadena HBO, ambientada en la Segunda Guerra Mundial, coproducida por Steven Spielberg y Tom Hanks. Una joya imprescindible, realista y con calidad en cada detalle.
Recrea las experiencias de la Easy Company (Compañía Easy) del 506º Regimiento de Infantería de Paracaidistas (506th Parachute Infantry Regiment), de la 101ª División Aerotransportada (U.S 101st Airborne Division) del Ejército de los Estados Unidos. En concreto, la acción gira en torno a uno de sus primeros líderes de pelotón, el Teniente Richard Winters (más tarde el Mayor Winters). La serie se basa en el libro del mismo título, escrito por el prestigioso historiador y biógrafo Stephen Ambrose, que investigó y entrevistó a los veteranos de la Easy Company. Todos los personajes que aparecen en la serie están basados en personas reales de esta compañía; y algunos de ellos aparecen en entrevistas pre-grabadas como prólogo a cada episodio.
La serie fue estrenada en 2001 por HBO y posteriormente se programó en The History Channel.
The Pacific, próxima a estrenarse, es la secuela, y no le anda a la zaga en calidad.

Prison Break – 2005
Gira en torno a un hombre sentenciado a la pena de muerte y el elaborado plan de su hermano para rescatarlo.
Lincoln Burrows es acusado de ser el autor de un crimen que él dice no haber cometido: asesinar a Terrence Steadman, el hermano de la Vicepresidenta de los Estados Unidos. Lincoln es sentenciado a muerte y enviado a la Penitenciaría Estatal Fox River, para cumplir allí su condena hasta el día de su ejecución. Michael Scofield, el hermano menor de Lincoln, está convencido de la inocencia de su hermano y elabora un plan de escape de la prisión. Después de haber planeado la fuga, Michael roba un banco a mano armada para que lo encarcelen en Fox River. Dentro de la cárcel debe llevar a cabo su plan, pero debe superar obstáculos, sobrevivir en prisión y aliarse con otros presos para poder escapar con su hermano de la prisión antes de su fecha de ejecución. Mientras, fuera de la cárcel la abogada Veronica Donovan, amiga de infancia de los hermanos, hace todo lo posible para aclarar la conspiración que llevó a Lincoln a la cárcel, pero los agentes secretos de una organización conocida como La Compañía, hacen lo imposible para obstaculizar el trabajo de Verónica.
Una de las mejores series de los últimos años. Cuatro tenporadas de acción a raudales y giros argumentales imprevisibles, con unos finales de episodio de infarto, que enganchan irremediablemente.

El coche fantástico (1982)
Esta serie tenía muchos de los factores que pueden calar en un niño, un protagonista seguro de sí mismo protagonizado por un David Hasselhoff antes de su marcha a las playas californianas de Baywatch, numerosas protagonistas femeninas que lucen palmito a raudales para gozo de los televidentes, y un coche fantástico de verdad, Kit, que cumple los deseos de su dueño.

La rosa amarilla (1984)
Esta serie seguía la senda de Dinastía, Falcon Crest o Dallas, con dramas entre familias, con la particularidad de que estaba ambientada en un fondo western, donde los protagonistas eran vaqueros con plantas petrolíferas y ranchos.
En ella aparecía Cybill Sheperd antes de protagonizar Luz de luna con Bruce Willis.




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