Trump se centra en ganar las elecciones
Donald Trump ha sido y es perseguido como nadie desde hace décadas. Tiene motivos fundados para denunciar este acoso sistemático y mostrarse enfadado, pero en vez de eso es necesario mantener la calma y enfocarse en ganar, tal y como está haciendo durante estas primarias, y de cara a las elecciones presidenciales de noviembre. Mi consejo es que se aleje de sentimientos de venganza y siga por esta senda optimista de ofrecer un futuro mejor para los estadounidenses y para el país. De nada sirve mostrarse enojado y enfadado todo el tiempo. Es infinitamente mejor mostrarse conciliador y unificador, del mimo modo que ha hecho ya en algunos de sus últimos discursos.
Alejarse de rencores y negatividad rompe definitivamente con esa imagen de Trump que los medios aliados de los demócratas quieren trasladar a toda costa, y que en nada se parece a la realidad. Trump está disfrutando esta campaña y así lo están percibiendo los votantes. Su más que probable nominación en julio sigue cosechando respaldos importantes y abriendo una brecha sustancial con Biden y el Partido Demócrata.
El carácter espontáneo de Trump es a veces su peor enemigo y por eso algunos de sus asesores y personalidades independientes le recomendamos templanza, dominio de los sentimientos y mostrarse tan humano como lo es en las distancias cortas y alejado de venganzas y odios.
Si logramos que Trump siga en esta senda de unificación del voto republicano e independiente, incluso del de algunos demócratas descontentos, lograremos una victoria histórica este año. Por supuesto, hay y habrá momentos durante esta larga campaña en la que la ira, el desprecio y la furia de Trump por tantas acusaciones y noticias falsas, deberá estallar, pero lo hará de forma controlada y enfocada a poner el foco en esos burdos montajes que intentan apartarlo de las elecciones y derrotarlo. Lograr ese equilibrio entre el Trump más agresivo y el Trump más conciliador es una de las piezas mágicas que puede conseguir una victoria aplastante. Ser duro, responsable y magnánimo no es excluyente en absoluto, y puede reportar beneficios electorales cuantiosos entre los votantes independientes, que son decisivos. Para ello, Trump debe potenciar sus puntos fuertes, ignorar las artimañas sucias de sus oponentes y de los medios aliados de los demócratas y del establishment, centrarse en ganar y ofrecer a los estadounidenses la promesa de un futuro mejor mediante su agenda America First y una unidad nacional verdaderamente constructiva.