Bosque Atlántico
Los bosques son garantía de vida y salud para el planeta. Sin embargo, los seres humanos nos estamos cargando los bosques con una ignorancia inaudita. El Bosque Atlántico, que es el segundo sistema forestal con más biodiversidad de Sudamérica después del Amazonas, es otro de los ecosistemas que corren un grave riesgo. Según han determinado estudios recientes de casi un centenar de científicos, publicados en la revista Ecology, sus especies desaparecen a un ritmo más rápido del que puede estudiarse.
Sus conclusiones ratifican la explotación que se está llevando a cabo y la deforestación alarmante que se ha producido. De los 1.199,160 kilómetros cuadrados de hábitat del Bosque Atlántico existentes en su día, entre Brasil, Paraguay y Argentina, hoy ya sólo queda entre un 8% y un 12% de ese territorio. Esto da una idea certera de la estupidez humana y su capacidad de destrucción de la naturaleza.
La deforestación se ha convertido en la gran amenaza para más de 279 especies de mamíferos y 388 de otras especies diversas nativas de la región. La deforestación es letal para los mamíferos, dado que la pérdida del hábitat es el factor principal de extinción.
Los estudios realizados por Noe de la Sancha, investigador del Museo Field de Chicago, y otros colegas científicos, son una llamada para que las autoridades competentes protejan la pequeña parte del Bosque Atlántico que aún existe para salvar las especies que viven allí.
Como siempre, las noticias más interesantes, como esta, jamás van en portada de los grandes medios de comunicación, empeñados en seguir atontando a la gente con noticias sensacionalistas, puro artificio y entretenimiento para que no piense por sí misma. El presente y el futuro del Bosque Atlántico es más importante que un grupo de vocingleras agrupadas en Metoo u otras plataformas feministas diciendo tonterías. Y hay que decirlo alto y claro.