Piratas de Somalia
La captura del navío español “Alakrana” por parte de piratas frente a las costas de Somalia, ha abierto dolorosamente de nuevo el tema de la protección de la flota pesquera que trabaja en esa zona. Que los pescadores están bajo permanente peligro y amenazados, es de sobra conocido por quienes venimos monitorizando la situación en esa región, en la que ha centrado su interés Al Qaeda, y en la que actúan los piratas somalíes con impunidad y desvergüenza (ver en este website los artículos que he dedicado al tema).
Dada la vastedad del área marítima a vigilar, el despliegue de seguridad “Atalanta” se muestra insuficiente para dar cobertura y seguridad a la flota pesquera.
La política española en este tema es torpe, timorata, e ineficaz. No es una opinión, es una realidad evidente, que pone de manifiesto ahora una vez más el secuestro del atunero “Alakrana”.
El ministerio de Defensa se empeña en una estrategia claramente insuficiente, que no responde a los desafíos que afrontamos. Lo deseable es que se logre la liberación del “Alakrana” lo antes posible, pero ni siquiera eso servirá de consuelo, porque la situación volverá a repetirse si no se cambia la estrategia de seguridad y se implementan medidas realmente eficaces, que permitan disuadir a los piratas somalíes de cualquier agresión a los barcos españoles. Entre las que autorizar militares armados en los barcos con orden de disparar ante posibles ataques, debería ser una de ellas.
Una vez más los responsables políticos han evidenciado su total incompetencia para garantizar el trabajo de los pescadores con seguridad. Dado que eso es precisamente lo que deben hacer, parece acertado concluir que han fracasado en su política y estrategia. Alguien debería rendir cuentas de este fiasco (otro más en la cuenta esperpéntica de Zapatero y su gobierno metido a labores humanitarias). Pero hablamos de España. Descuide, no habrá responsabilidades de ningún tipo. Faltaría más. Eso no sería progresista.