La guerra global contra el terrorismo yihadista sigue activa y rindiendo éxitos a la estrategia de Estados Unidos. Las ofensivas realizadas en Libia y Somalia contra líderes y miembros de Al Qaeda y Al Shabab, se han cerrado con la captura en Libia de Nazih al Ruquay, alias Abu Anas al Liby, destacado miembro de Al Qaeda buscado por los ataques terroristas contra las embajadas estadounidenses en Kenia y Tanzania en agosto de 1998, que se cobraron 229 víctimas, y en los que tuvo un papel relevante, entre otras operaciones terroristas, y la muerte de algunos miembros del grupo Al Shabab en Somalia. Ambas operaciones han sido coordinadas entre los Navy Seal Six Team, los Delta Force, y agentes de la CIA y el FBI.

A Abu Anas al Liby, uno de los expertos en informática de Al Qaeda, de acuerdo a las declaraciones que hizo en su día otro colega suyo caído en manos estadounidenses, el antiguo contable de Al Qaeda Jamal Ahmed Al Fadl, le ha llegado el turno de cantar en los interrogatorios, y no precisamente La Traviata. Por lo que se desprende de sus declaraciones y “cantos”, el hombre ha estado bien ocupado estos años con sus actividades para Al Qaeda; actividades que han cesado para siempre. Entre esas tareas estuvo la elaboración del denominado «manual del terror», titulado Estudios militares en la guerra santa contra los tiranos, en el que Al Qaeda daba instrucciones para asesinar civiles, bombardear objetivos y derribar gobiernos laicos para sustituirlos por regímenes islámicos. O sea, un angelito.

La captura de Abu Anas al Liby estuvo a cargo de los Delta Force y agentes de la CIA y el FBI, mientras que la operación realizada en Somalia contra destacados miembros de Al Shabab, que no logró todos los objetivos marcados (la captura de varios líderes de esta milicia islamista), fue ejecutada por los Navy Seal Six Team con apoyo de la CIA.
Con ambas operaciones Estados Unidos asesta duros golpes a Al Qaeda en el escenario internacional y vuelve a lanzar un mensaje inequívoco, no habrá refugio seguro para ningún terrorista de la organización en todo el mundo.