Barack Obama, ganador de los caucus de Wyoming, tierra de republicanos, montañas, Yellowstone, cowboys, y parte esencial del circuito de rodeos que se celebran en tierras del Oeste. El Senador por Illinois se lleva 7 delegados frente a los 4 de Clinton, con un 61% de los votos frente al 38% de Hillary. Otra nueva victoria.
Wyoming no aporta diferencias sustanciales, pero sigue marcando la tendencia ganadora de Obama en los caucus, mientras Hillary acostumbra a ganar las primarias.

En este escenario, que jamás hubieran imaginado los Demócratas y que, en realidad, nadie pronosticaba hace un año, el papel de los controvertidos delegados de Florida y Michigan, así como el de los Superdelegados, va a ser decisivo para que uno u otro se lleve la nominación final.
Queda mucho camino por recorrer al Partido Demócrata para lograr un candidato a la Presidencia, lleno de incertidumbre y desgaste para los contendientes, con todas las opciones abiertas.

Barack Obama ha anunciado un nuevo récord de recaudación en febrero, por encima de Hillary, lo que inyecta recursos que le serán muy necesarios para combatir la formidable maquinaria de presión e influencias a disposición de los Clinton.

La próxima cita será en Mississippi, donde hay en juego 32 delegados.

Entretanto, John McCain sigue preparando la campaña para noviembre. Varios miembros de los equipos electorales que trabajaron en su día para George W. Bush, se unirán o participarán de alguna manera en el Team McCain. Nombres de tanto peso estratégico como Karl Rove o Ken Mehlman, actuarán como asesores especiales. Y sigue su búsqueda y selección para el running-mate, el candidato a Vicepresidente, que le acompañará en el viaje a la Casa Blanca con varios nombres ya destacados.