Especies en riesgo y cambio climático
La contaminación, la expansión demográfica humana, la presión industrial y agrícola y los cambios climáticos están llevando a numerosas especies animales y vegetales a una situación crítica y al borde de la extinción.
Todo lo que se haga para concienciar a la población sobre este problema y para llevar a cabo acciones que hagan posible su conservación, es positivo y necesario.
Los especialistas ya han confirmado que vamos a provocar la sexta gran extinción de especies de la historia de la Tierra por culpa de las actividades humanas, que están generando un cambio en los ecosistemas y la vida salvaje. WWF ha publicado un informe con algunas especies emblemáticas que están en peligro, pero hay muchas más. Estas especies requieren de medidas especiales de protección:
Panda gigante
El análisis de más de 10.000 poblaciones de vertebrados (mamíferos, pájaros, peces, reptiles y anfibios) ha concluido que estos grupos de animales han menguado un 52% entre 1970 y 2010. En este caso, el cambio climático amenaza con dejarle sin bambú, una planta muy vulnerable y que supone el elemento esencial de su dieta.
Oso polar
El oso polar es otra de esas especies emblemáticas amenazadas. Al gigante blanco le está acorralando el calentamiento del Ártico al doble de la velocidad de la media mundial, lo que está reduciendo su hábitat al derretirse el hielo. Dado que los osos polares están especializados en la caza de focas, que descansan y crían sobre el hielo marino, su derretimiento provoca que el período de caza se acorte, por lo que tiene que ayunar durante más tiempo.
Elefante africano
El elefante africano no sólo está desapareciendo por culpa de los furtivos y el comercio ilegal del marfil. La desaparición de la vegetación por la desertificación (que se extenderá entre el 5% y el 8% para 2080) y el aumento en la frecuencia e intensidad de las sequías en partes del continente africano, provocará un aumento significativo de árboles de hoja caduca y hierbas resistentes al calor, perdiéndose los árboles de hoja perenne y alterándose el equilibrio de los ecosistemas por la desaparición de los acuíferos.
Tortuga marina
Aunque las tortugas marinas han ido evolucionando en los océanos de todo el mundo durante más de 100 millones de años y han sobrevivido a los cambios climáticos del pasado de una manera notable, la velocidad del calentamiento actual es causa importante de preocupación. La temperatura juega un papel clave en todas las etapas de la vida de la tortuga marina: su sexo se determina por la temperatura de incubación de los huevos enterrados en la arena de la playa, por lo que un pequeño aumento de la temperatura puede cambiar seriamente la proporción de los sexos a favor de las hembras. Además, tormentas más violentas significarán la destrucción de importantes playas de anidación de muchos huevos.
Orangután de Borneo
El orangután de Borneo es otro de esos animales a los que los humanos están atropellando de manera directa, con talas ilegales y compitiendo por el hábitat, pero también mediante el cambio climático provocado por las emisiones de dióxido de carbono. Se está añadiendo una presión adicional sobre los bosques de Indonesia y, en consecuencia, poniendo en mayor peligro la supervivencia de los orangutanes. Las lluvias aumentarán su intensidad, acentuando el riesgo de inundaciones y cambiando el ritmo de crecimiento de las plantas con las que se alimentan: la cantidad de comida disponible disminuirá afectando la capacidad reproductiva de las hembras.
Ballena azul
El hábitat natural de la ballena azul está cambiando por culpa del cambio climático debido al impacto que tiene en su acceso a los alimentos, lo que podría tener una repercusión fatal en sus poblaciones, junto a la acidificación de los océanos y los cambios en el ecosistema, que obligarán a ampliar en cientos de kilómetros sus desplazamientos para comer.
Edelweiss
Edelweiss es una flor en forma de estrella con hojas ‘peludas’ que vive a una altitud de hasta 3.400 metros. Las temperaturas provocadas por el cambio climático tendrán un impacto negativo al obligar a otras especies de plantas que viven en altitudes inferiores a colonizar estas zonas de mayor altitud, creando una competencia que no podrá vencer.
Abejorro
Los abejorros de Europa y América del Norte están desapareciendo de las partes más meridionales y más calientes de su área de distribución. Algunos abejorros se han retirado hasta 300 kilómetros del extremo sur de su área de distribución histórica. Esta es una situación alarmante porque como buenos polinizadores activos, desempeñan un papel clave en la relación con los cultivos y la seguridad alimentaria.
Coral cuerno de arce
El calentamiento de la temperatura del agua marina y el aumento de la acidificación de los océanos son responsables del fenómeno de la decoloración de los corales. El blanqueamiento ocurre cuando el coral expulsa las algas microscópicas con las que vive en simbiosis por culpa de este calor. Las algas suministran al coral su comida y les otorgan vistosos colores a su esqueleto calcáreo. Y si no regresan al tejido del coral, el coral muere.
Esta lista también incluye al gorila de montaña, la mariposa monarca, el atún rojo, los pingüinos de Magallanes, la morsa del Pacífico, el tigre de bengala, el leopardo de las nieves y la tortuga laúd. En el caso de los tigres, víctimas de la caza furtiva, tan sólo qudan 3.200 ejemplares en libertad, lo cual representaría un 40% menos que hace diez años.
Todas son especies de enorme valor e imprescindibles para mantener nuestros ecosistemas sanos. Salvarlas es tarea de todos.