La semana de la victoria de Trump
Ha sido, sin duda, una de las mejores semanas en la presidencia de Donald Trump. Una semana de victoria personal y presidencial para el que ha sido y es uno de los hombres más acosados por los medios de comunicación y por un Partido Demócrata en manos de radicales socialistas de izquierdas.
La semana pasada, que ya es historia de los Estados Unidos, empezó con una victoria arrolladora de Trump en los caucus republicanos de Iowa con un porcentaje del 97%. Continuó con un discurso épico del Estado de la Unión el martes, que noqueó a los demócratas y a Nancy Pelosi, que se sumió en un ataque de cólera ante las verdades que iba exponiendo el presidente una a una con serenidad presidencial. La demócrata, que cada día está más como un cencerro, terminó rompiendo su copia del discurso en papel, cegada por la ira ideológica que anida en todos los socialistas. De ese discurso optimista de Trump, basado en datos y hechos reales del mejor presidente en décadas que está llevando a la nación a un futuro espléndido, podemos destacar los siguientes comentarios y perlas verbales que nos dejó y que conviene no olvidar:
«Los empleos se multiplican, los ingresos están aumentando, la pobreza cae en picado, la delincuencia está disminuyendo, la confianza está aumentando, y nuestro país está prosperando y es respetado nuevamente»
«Nuestro ejército está completamente reconstruido, con un poder incomparable en cualquier parte del mundo. Nuestras fronteras son seguras. Nuestras familias están floreciendo. Nuestros valores se renuevan. Nuestro orgullo está restaurado. Y por todas estas razones, le digo a la gente de nuestro gran país y a los miembros del Congreso, el estado de nuestra unión es más fuerte que nunca»
«El sueño americano está de vuelta, más grande, más fuerte y mejor que nunca, y nadie se está beneficiando más que nuestra clase media»
«La guerra impone una pesada carga a las extraordinarias familias militares de nuestra nación, especialmente a los cónyuges como Amy Williams de Fort Bragg, Carolina del Norte, y sus dos hijos: Elliana, de 6 años, y Rowan, de 3 años. Amy trabaja a tiempo completo y se ofrece como voluntaria innumerables horas para ayudar a otras familias militares. Durante los últimos siete meses, lo ha hecho todo mientras su esposo, el sargento Townsend Williams, de primera clase, se encuentra en Afganistán en su cuarto despliegue en Medio Oriente. Los niños de Amy no han visto la cara de su padre en muchos meses. Amy, el sacrificio de tu familia hace posible que todas nuestras familias vivan en paz y seguridad, te lo agradecemos”
«Ya seamos republicanos, demócratas o independientes, seguramente todos debemos estar de acuerdo en que cada vida humana es un regalo sagrado de Dios»
«La tasa de desempleo de los afroamericanos, hispanos y asiáticoamericanos alcanzó los niveles más bajos de la historia. La tasa de desempleo de las mujeres el nivel más bajo en casi 70 años. El año pasado, las mujeres ocuparon el 72% de todos los nuevos empleos agregados»
«Estamos avanzando con optimismo desenfrenado y elevando a nuestros ciudadanos de todas las razas, colores, religiones y creencias muy, muy alto. Desde mi elección, hemos creado más de 7 millones de nuevos empleos».
“El estado de nuestra unión es más fuerte que nunca”
«A diferencia de muchos que vinieron antes que yo, cumplo mis promesas”
Las victorias de la semana prosiguieron el miércoles con la absolución en el impeachment. Trump celebró su victoria en el juicio político celebrado en el Congreso con un encuentro público en la Sala Este de la Casa Blanca el jueves con su familia, amigos, compañeros, trabajadores y simpatizantes. Una victoria que lo es también para la nación y la democracia americana y en la que el presidente no ahorró calificativos para los acusadores: corruptos, perversos, enfermos, y destructores del país. Por el contrario, se mostró enormemente agradecido a los «guerreros increíbles» que se pusieron de su lado durante esta difícil prueba.
Algunos de sus comentarios tras la absolución reflejan bien el espíritu que animaba al presidente durante esa jornada histórica, que empezó por la mañana durante el Desayuno Nacional de Oración:
«Para proteger a las comunidades religiosas, he tomado medidas históricas para defender la libertad religiosa, incluido el derecho constitucional a rezar en las escuelas públicas».
«No me gustan las personas que usan su fe como justificación para hacer lo que saben que está mal, ni me gusta la gente que dice ‘rezo por ti’ cuando saben que no es así».
«Estados Unidos está eternamente en deuda con nuestras iglesias afroamericanas. Durante generaciones, los afroamericanos lucharon valientemente por la justicia y levantaron la conciencia de nuestra nación».
«La fe nos mantiene libres, la oración nos hace fuertes, y solo Dios es el autor de la vida y el dador de la gracia».
«No castigamos la oración, no derribamos cruces, no prohibimos los símbolos de la fe … En Estados Unidos, celebramos la fe, apreciamos la religión y alzamos la vista para la gloria de Dios».
«A nuestro país nunca le ha ido mejor de lo que lo está haciendo en este momento. La satisfacción de los estadounidenses está al más alto nivel».
“Piensen en lo que podríamos haber hecho si pusiéramos la misma energía en otras cosas como lo hicimos con la destitución”
“Primero pasamos por Rusia, Rusia, Rusia … todo fue una mierda. Luego revisamos el informe de Mueller y deberían haber regresado un día después, no lo hicieron, regresaron dos años después”
«Estas personas son perversos. Adam Schiff es una persona perversa y horrible. Nancy Pelosi es una persona horrible».
«Los demócratas no son capaces ni de contar sus votos y quieren gestionar la sanidad».
«Los demócratas han enloquecido, están completamente trastornados»
«Este proceso ha sido muy injusto con mi familia, hemos sufrido mucho».
«Los demócratas son malos, crueles. Nancy Pelosi es una persona horrible».
«Lo que querían era hacerme daño porque ganamos las elecciones, uno de los éxitos más tremendos en elecciones»
Trump muestra un ejemplar de «The Washington Post» y proclama: «Es el mejor titular que me ha dado este diario». Se lee: «Trump absuelto».
«Esto no es una conferencia o un discurso, es una celebración. No hice nada malo. Fue un calvario».
«Este proceso contra mí comenzó cuando presenté mi candidatura. Ha sido cruel, corrupto, sucio, no debería pasarle a ningún presidente más».
“Solo quiero agradecer a mi familia por seguir adelante y no abandonar. Esto no era parte del trato…».
Las buenas noticias siguieron el viernes con dos importantes confirmaciones:
La creación de 225.000 nuevos empleos en enero y la confirmación de la eliminación del terrorista Qasim al Rimi, el líder de la organización Al Qaeda en la Península Arábiga, en Yemen, el pasado enero. Para culminar esta gran semana, Trump despidió de forma fulminante a los gemelos Alexander y Evgueni Vindman, del Consejo de Seguridad Nacional, y al embajador de Estados Unidos ante la Unión Europea, Gordon Sondland, por su contar una serie de suposiciones propias falsas en su testimonio durante el impeachment.
Como guinda, el sábado conocimos una nueva encuesta que refleja una aprobación del discurso sobre el Estado de la Unión de Trump del 82% entre los votantes independientes, que son un factor determinante para ganar las elecciones en noviembre.
La decisión de absolución del Senado significa la completa reivindicación de Trump y destroza la caza de brujas efectuada por los demócratas, que privaron al presidente de su debido proceso y estuvo basado siempre en una serie de mentiras partidistas, tal y como ha quedado perfectamente demostrado y documentado.
La semana de la victoria de Trump lo ha fortalecido de forma extraordinaria de cara a la reelección en noviembre. «Cuatro años más, cuatro años más»,
coreaban los senadores en el Congreso a su entrada para el discurso sobre el Estado de la Nación. Hoy, esos cuatro años están más cerca de hacerse realidad para seguir haciendo América Grande Otra Vez. La promesa que Trump está haciendo realidad.