Este año se cumple el trigésimo quinto aniversario de la muerte de John Wayne, uno de los mejores y más queridos actores de Estados Unidos. El veterano vaquero sigue ocupando las preferencias del público, que lo elige año a año como uno de los más admirados.
Verdadero patriota, excelente actor, experto jinete, carismático, y gran persona, John Wayne es un icono estadounidense irremplazable y esencial. Forma parte de la herencia cultural de este país y su trabajo en decenas de películas y sus ideas son de lo mejor que podemos encontrar en Estados Unidos.
Admirado por la mayoría y odiado por unos pocos intolerantes que no soportan que el actor hablara claro sobre sus ideas políticas y mostrara su patriotismo y conservadurismo abiertamente, John Wayne es el representante más genuino del cine western, llegando a protagonizar algunas de las mejores obras maestras del género. No sólo intervino en películas del Oeste, también en dramas, bélicas, comedias, policiacas, y de aventuras. Un actor todoterreno con cualidades interpretativas sobresalientes, dotado de una naturalidad extraordinaria en pantalla (que sólo encontramos en otros verdaderamente grandes como James Stewart, Gary Cooper, Alan Ladd, Burt Lancaster, Glenn Ford, Lee Marvin, Robert Mitchum, Kirk Douglas, o Charlton Heston, por citar algunos), y que ya quisieran para sí algunos de los blandengues y progresistas actores actuales, a muchas millas de cabalgada del gran Duke y de los citados.
Desacreditado por algunos sectores, con claras intenciones ideológicas, de nada les ha servido porque el actor sigue siendo uno de los más aclamados por el público y la mayoría de los críticos, insustituible en el número uno de todas las encuestas de opinión sobre western, y al que solo se acerca Clint Eastwood.

Nadie como él supo representar los valores del héroe americano: patriotismo sin fisuras, virilidad, honestidad, coraje, valentía, fuerza, ternura, lealtad, vitalidad, generosidad, y autenticidad. Por todo ello se convirtió y sigue siendo un símbolo americano y parte inherente de nuestra cultura.
Johyn Wayne pudo ganar el Oscar muchas veces por interpretaciones magistrales, pero se lo llevó por True Grit (Valor de ley), donde interpretaba al Marshal tuerto Rooster Cogburn. Para entonces ya llevaba cuarenta años dedicado al cine y había forjado una leyenda que aún perdura. Es el cowboy por antonomasia y el héroe americano sólido y firme.
Lo dirigieron algunos de los más grandes directores de cine de la historia: John Ford, Howard Hawks, Henry Hathaway, Andrew McLaglen, Raoul Walsh, Cecil B. De Mille, Budd Boetticher, William Wellman, Michael Curtiz, Burt Kennedy, Mark Rydell, Don Siegel…
Sus películas son imprescindibles y nos remiten al mejor cine: Algunos de sus títulos más destacados son estos:
Stagecoach (La Diligencia – 1939), Fort Apache (1948), Río Rojo (1948), Godfathers (Tres Padrinos – 1948), She Wore a Yellow Ribbon (La legión invencible (1949), Arenas Sangrientas (1949), Río Grande (1950), , El hombre tranquilo (1952), Hondo (1953), Big Jim McLain (1952), The Searchers (Centauros del desierto – 1956), Rio Bravo (1959), The Horse Soldiers, (Misión de audaces – 1959), El Alamo (1960), ) North to Alaska (Alaska, tierra de oro – 1960), The Comancheros (Los Comancheros 1961), The Longest Day, The (El día más largo – 1962), The Man Who Shot Liberty Valance, (El hombre que mató a Liberty Valance – 1962), Hatari! (1962), How the West Was Won (La conquista del Oeste – 1962), McLintock! (1963), The Sons of Katie Elder, The (Los cuatro hijos de Katie Elder – 1965, El Dorado (1967), War Wagon, The (Asalto al carro blindado – 1967, Los boinas verdes (1968). El Alamo (1960), True Grit (Valor de Ley – 1969), The Undefeated, (Los indestructibles – 1969), Rio Lobo (1970), Chisum (1970), Big Jake (El gran Jack – 1971),The Cowboys (1972), The Train Robbers, The (Ladrones de trenes – 1973, El último pistolero (1976), Cahill: United States Marshal (1973), McQ (1974), Rooster Cogburn (1975), Brannigan (1975), The Shootist, The (El último pistolero – 1976).

Además de sus grandes películas, John Wayne nos ha legado su famosa forma de andar, un timbre de voz reconocible en cualquier momento, posturas y gestos masculinos, una presencia física colosal y una calidez humana firme pero sin caer en la tontería. Él tiene el récord de la mayor cantidad de papeles protagonistas en la historia del cine con 142 y el honor de haber sido incluido en 1999 por el American Film Institute en la lista de las 100 Estrellas Más Grandes de Todos los Tiempos, ocupando el número 13. En una encuesta realizada en 1970 en los Estados Unidos, con el objeto de determinar los personajes más famosos de la historia de este país, John Wayne alcanzó el segundo puesto, tras el Presidente Abraham Lincoln. La encuesta Harris le otorgó en 2007 el tercer lugar entre las estrellas favoritas de los Estados Unidos, fue la única estrella ya fallecida de la encuesta y a la vez, la única estrella que había estado apareciendo en ella todos los años. De hecho, sigue figurando en la lista de las diez estrellas de cine más populares todos los años, a pesar de que él murió en 1979. En la encuesta de 2013 John Wayne era el número cinco. Sólo Johnny Depp, Denzel Washington, Clint Eastwood y Tom Hanks estuvieron delante de él. Todos ellos todavía están vivos y trabajando. Esto dice bastante de lo que significa John Wayne para el público y la enormidad de su herencia cinematográfica. O sea, resumiendo, grande entre los más grandes.

Cuando comenzaba su carrera cinematográfica, allá hacia finales de los años 20, John Wayne conoció personalmente al antiguo marshal Wyatt Earp, conocido por su participación en el tiroteo en O.K. Corral. Wyatt Earp buscaba algún estudio que quisiera comprarle sus memorias y en uno de ellos se conocieron. Fue él quien le enseñó a hablar y a moverse como lo hacían en el antiguo oeste, algo que influyó en Wayne durante toda su carrera y lo dotó de autenticidad en todos sus movimientos y diálogos.
Este 11 de junio se cumplen 35 años de la muerte del Duke, cuya herencia humana, cultural e ideológica siguen vivas, a través de sus películas y sus ideas, siempre defendidas con valor y nobleza durante toda su vida. John Wayne recibió con justicia la Medalla de Oro del Congreso en la que figura la leyenda: «John Wayne American».
Trabajó hasta casi el final de su vida e hizo más de 200 películas durante 50 años de brillante carrera. Sí, John Wayne era americano. Nada lo podría expresar mejor.

Los premios que le concedieron o a los que fue nominado fueron estos:

PREMIOS DE LA ACADEMIA (USA)
Año Resultado Premio Categoría
1970 Ganador Oscar al Mejor Actor por: True Grit (1969)
1961 Nominado Oscar a la Mejor Película por: The Alamo (1960)
1950 Nominado Oscar al Mejor Actor por: Sands of Iwo Jima (1949)

GLOBOS DE ORO (USA)
Año Resultado Premio Categoría
1970 Ganador Globo de Oro por True Grit (1969) Mejor Actor Dramático
1966 Ganador Premio Cecil B. DeMille –
1953 Ganador Globo de Oro World Film Favorite-Male

Además también participó en los siguientes documentales y especiales para la radio, TV y teatro:

Documentales:
.-1955 The challenge of ideas .-1970 No substitute for victory
.-1970 Chesty .-1971 Directed by John Ford
Radio y discos:
.-1942/43 Three sheets to the wind .-1973 America, why I love her
Teatro
.-1950 What price Glory?
Televisión:
.-1955 Rookie of the year .-1960 The Colter Craven story
.-1962 Flashing spikes

Best John Wayne Movie Quotes

John Wayne winning Best Actor for «True Grit»

John Wayne Documentary

Best John Wayne Quote – ever!

John Wayne «America – Why I Love Her»

The Duke’s last hurrah (ir al minuto 5)