Este año 2009 ha empezado con excelentes noticias en la Guerra contra el Terrorismo. El 1 de enero EE.UU eliminó cerca de Karikot, en Waziristán del sur, en el norte de Paquistán, a Osama al-Kini y Sheikh Ahmed Salim Swedan, el primero de ellos jefe de Al Qaeda en Paquistán y el segundo su lugarteniente, ambos nacidos en Kenia; gracias a los datos de Inteligencia y el ataque con misiles Hellfire, teledirigidos, de 45 kilos, realizado desde un avión no tripulado Predator, que los alcanzó en el edificio que utilizaban para entrenar con explosivos. Ambos estuvieron involucrados en el ataque contra el hotel Marriott de Islamabab, en septiembre de 2008, en el que hubo alrededor de 55 víctimas, y en otra serie de ataques. Los dos murieron cuando preparaban nuevos actos terroristas.
Osama al-Kini, cuyo verdadero nombre era Fahid Mohammed Ally Msalam, se convierte en el octavo líder de Al Qaeda eliminado mediante ataques directos desde que en septiembre pasado se iniciaron este tipo de operaciones, que se llevan a cabo cada vez con más frecuencia y que han permitido detener o eliminar a importantes miembros de la organización terrorista. Kini había entrenado a terroristas en África durante la década de los 90 y participó en la planificación de los ataques a las embajadas de EE.UU en Kenia y Tanzania en 1998, que costaron la vida a 240 personas. Responsable de Al Qaeda en Paquistán desde 2007, organizó más de siete ataques suicidas y un intento fallido contra la entonces primera ministra Benazir Bhutto.

Esta acción pone de manifiesto que Paquistán sigue siendo un objetivo prioritario para la CIA y las fuerzas especiales norteamericanas, que luchan sin tregua para que este país deje de ser el santuario de Al Qaeda y los Talibán. Estas muertes implican una pérdida importante del liderazgo de Al Qaeda en la región y un golpe en su estrategia.

Días después, otra operación de tropas norteamericanas, esta vez conjuntamente con tropas iraquíes, logró eliminar a otro líder de Al Qaeda y 9 miembros más de la organización en Iraq, en las provincias de Salahedín y Diyala, al norte de Bagdad. Las operaciones se desarrollaron en la zona de Albu Oyeil, cinco kilómetros al este de Tikrit, capital de Salahedín, y cerca de Baquba, capital de la provincia de Diyala, al noreste de Bagdad.
De nuevo el éxito de la misión tuvo su origen en los datos de Inteligencia, que identificaron los refugios de los terroristas.

El tercer éxito en este recién iniciado 2009 tuvo lugar en Argelia, donde la información de Inteligencia proporcionada a los servicios de seguridad argelinos, propició el desmantelamiento de un plan de Al Qaeda para el Magreb Islámico (AQMI) destinado a secuestrar ciudadanos alemanes en Argel, en su mayoría técnicos que trabajan en empresas encargadas de las obras del metro.
Los planes terroristas incluían ataques con bombas contra edificios oficiales. La operación permitió el arresto de once terroristas de la célula y continúa abierta para detener a otros miembros huidos a la Cabilia, la región montañosa donde tiene algunos de sus refugios Al Qaeda para el Magreb Islámico.
Los interrogatorios de los detenidos han permitido conocer la identidad de los alemanes que serían secuestrados y sus intenciones de pedir rescate. No es la primera vez que en Argelia se desmantela una red de Al Qaeda con estos propósitos. En la primavera de 2008, otra información de Inteligencia permitió destruir una red similar en la provincia de Buira, en la Cabilia, que planeaba secuestrar ciudadanos chinos empleados en una empresa que lleva a cabo trabajos en carreteras y autopistas.
Los riesgos que entrañan las actividades de AQMI en Argelia y el Magreb, son altamente peligrosos para países vecinos, como España, que recibe buena parte de sus reservas de gas de este país.

Tres noticias excelentes para empezar 2009 en la lucha contra Al Qaeda. Tres éxitos de EE.UU.

Sin embargo, desafíos no faltan. Porque la esucela de terrorismo en que se ha convertido Al Qaeda podría depararnos aún sorpresas. Esa legión de niños entrenados por Al Qaeda, muy pronto ya adultos, podrían ser la próxima generación que haya que combatir. Ojalá sólo sea necesario educarlos de nuevo.

Al Qaeda Trains Children