Trump apoya la integridad electoral
La integridad del proceso electoral no sólo es una prioridad nacional, sino también un compromiso personal de Donald Trump. Con el objetivo de garantizar y salvaguardar la integridad del proceso electoral, la campaña de Trump y el Comité Nacional Republicano (RNC) han lanzado el más ambicioso y extenso programa de integridad en la historia de Estados Unidos, el cual colocará a más de 100.000 voluntarios, abogados y especialistas desplegados en todos los estados. Se trata de lograr la máxima transparencia y equidad en las elecciones de 2024, de modo que se recupere la confianza de los ciudadanos, gravemente dañada por el fraude cometido por los demócratas en 2020, y cuyas pruebas y evidencias siguen conociéndose aún hoy día, aunque los grandes medios las silencian y ocultan.
Al lanzar este programa, Trump declaró: “Tener a las personas adecuadas para contar las papeletas es tan importante como convocar a los votantes el día de las elecciones. Los republicanos ahora están trabajando juntos para proteger el voto y asegurar una gran victoria el 5 de noviembre”.
No podemos olvidar que la integridad electoral es la base de cualquier democracia y cualquier medida encaminada a conseguirlo debe ser bienvenida. Con este programa, siempre que se emita o se cuente un voto, los observadores electorales republicanos controlarán el proceso e informarán de cualquier irregularidad que se produzca. En caso de detectarse algún problema, los abogados del RNC y los abogados voluntarios brindarán servicios de respuesta rápida para resolver el problema utilizando un protocolo de actuación probado y efectivo.
Los trucos y los fraudes demócratas de 2020 no deberán funcionar este año. En 2024 el equipo legal del RNC trabajará para garantizar que los funcionarios electorales sigan las reglas al administrar las elecciones. De no hacerlo o si intentan cambiar las reglas en el último minuto, se les llevará a los tribunales. Trump quiere que la victoria sea demasiado grande como para que no puedan cometer fraude ni manipular las elecciones. Para ello, el equipo político de campaña ya trabaja para garantizar esta victoria en todos los niveles, y el departamento legal del RNC está comprometido a garantizar que la victoria no pueda ser manipulada. En cada votación, recinto, centro de procesamiento, condado, y estado en disputa, allí estarán los equipos de este programa de integridad para proteger el voto. Con este fin, podrán reclutar, capacitar y, cuando sea posible y necesario, cambiar a los observadores y trabajadores electorales. Con los esfuerzos de los partidarios de base y de expertos legales, el programa está estableciendo ya una sólida red de monitoreo y protección contra cualquier violación o fraude. Así, de forma activa, esta innovadora iniciativa pone de relieve el compromiso del RNC y la campaña Trump para proteger las elecciones.
En esos meses previos, los abogados y los observadores y trabajadores electorales, llevan a cabo sesiones integrales de capacitación sobre el monitoreo no sólo de los sitios de votación, sino también de los centros de tabulación de las papeletas. Estas capacitaciones sitúan a los voluntarios con los conocimientos y las habilidades necesarias para supervisar de manera efectiva los problemas potenciales en el proceso electoral, garantizando que cada voto se cuente de manera precisa y justa. Hay cinco áreas de observación en las que se garantizará cobertura y en todas estas etapas participarán abogados para detener los intentos demócratas de eludir las reglas:
Pruebas de máquinas de lógica y precisión
Votación anticipada
Votación el día de las elecciones
Procesamiento de papeletas por correo: adjudicación y duplicación
Después de las elecciones: sondeos, auditorías, y recuentos
Se colocarán abogados en cada centro de procesamiento objetivo donde se tabulan las papeletas por correo. Este programa comienza con abogados que se comprometen con los sitios de votación estatales más disputados, las juntas electorales de los condados, los secretarios de las oficinas estatales y las salas de control del Partido Republicano. Cada estado en disputa está operando su propia “línea directa de integridad electoral” y la sala de control republicana es el centro de comando donde los abogados responderán todas las preguntas entrantes y los problemas de los que informarán los observadores electorales y los votantes en todo el estado. Los abogados guiarán a los observadores electorales a través del código electoral apropiado y brindarán claridad sobre cómo se deben responder, resolver o gestionar diversas cuestiones. Este sistema estará operativo desde el primer día de votación anticipada hasta el día de las elecciones, y posteriormente si es necesario.
Bajo el nuevo liderazgo del presidente Michael Whatley y la copresidenta Lara Trump, el Comité Nacional Republicano está ejecutando una estrategia legal para luchar en los tribunales de todo el país. Para ello, se realizará un esfuerzo de litigio proactivo cada vez que los funcionarios electorales violen la ley y también se intervendrá para defender las salvaguardias de sentido común de la ley electoral bajo el ataque demócrata. De hecho, el equipo de abogados del RNC ya está participando en batallas legales en todo el país. En lo que va de este ciclo electoral, el RNC ha participado en concreto en 82 demandas de integridad electoral en 25 estados. Todo esto es posible gracias a los movimientos estratégicos que ha realizado Donald Trump para controlar el Comité Nacional Republicano gracias a sus aliados. El alcance de este programa de integridad electoral refleja su compromiso real con la auténtica democracia estadounidense.