Se reproduce a continuación la entrevista concedida al blog Harto de Zporky, uno de los blogs que hacen gala de informar con independencia de la política española, desde una óptica crítica con el actual gobierno y un estilo franco e irreverente.

Blog Harto de ZPorky
James Nava ha sido un tipo valiente, ha enviado decenas de e-mails a bloggers, que como yo, un buen día recibieron un comentario con su @ como parte de su campaña de promoción de la novela “Lobo Gris”. Muy loable.

Me parece estupendo… Si yo publicito al Sr. Nava, al menos, espero de él, unas respuestas, que espero conseguir…

Aquí están esas respuestas.
H. ¿Porqué ha escogido los blogs y ya puestos, porqué éste, tan irreverente y tan políticamente incorrecto, como medio de divulgación de su novela, amén de usar los cauces clásicos?

J. N. He elegido los blogs porque son los medios que más están creciendo y tienen una proyección social importante. Por tanto, son perfectos para llegar a la gente.
Hay miles de blogs, yo he seleccionado sólo una mínima parte, aquellos que me gustan, que despiertan mi atención por alguna razón, o que considero interesantes para dar a conocer la novela.
Elegí el suyo porque, a priori, no discrimino ninguno, y me atrajo el punto de vista irreverente con el que trata la actualidad. Lo encontré original y me gustó.

H. Sr. Nava ¿qué opina, cómo ve y valora el ciudadano medio americano a España, como país, y a su gobierno en particular? Somos un aliado un tanto peculiar ¿no?…

J. N. Sucede que España no es un país que tenga gran repercusión en Estados Unidos, salvo en algún tema muy puntual. El ciudadano medio no conoce mucho España, únicamente hay algunos tópicos bien extendidos. Sólo una minoría conoce la realidad del país.
En concreto sobre el actual gobierno español puede encontrar opiniones para todos los gustos, desde que no lo conocen, que es un gobierno horroroso e incompetente, hasta que no está mal y mola. Pero, créame, el gobierno de Zapatero no está entre las preocupaciones o las opiniones habituales de los americanos.
Eso sí, los desplantes y errores de Zapatero en cuestiones como no levantarse, en su día, ante el paso de la bandera norteamericana, o la salida de las tropas de Iraq y Kosovo, extienden la opinión de que no es un gobierno leal ni fiable.
Con Zapatero en la Moncloa, España más que un aliado peculiar es un gobierno que no tiene rumbo definido en su política y que se mueve más por planteamientos populistas, de cara a sus votantes. En suma, un aliado poco fiable en cuestiones verdaderamente importantes.

H. Me lo temía… Aunque supongo que en USA no existe un sentimiento similar al «antiamericanismo» que tanto se prodiga por estas tierras. Sr. Nava estamos en estos momentos sumergidos en una gran crisis. Unos dicen que financiera, económica, otros van mucho más allá y ven una enorme crisis de valores. E incluso aún hay quien va aún más allá y ve el fin de una era y el inicio de otra. En la «nueva» era que se nos avecina muchos españoles y muchos, demasiados para mi gusto, europeos, ven a Obama como el nuevo «Mesías». Parece que será la solución de todos los problemas y sin embargo, ha sido protagonista de un enorme descenso de popularidad en USA. ¿Usted que opina? ¿Va a ser Obama la solución o va a empeorar el problema?

J. N. Efectivamente, en Estados Unidos no existe nada similar, no hay antieuropeísmo. Me temo que esos sentimientos son más bien propios de quienes tienen complejos de inferioridad, envidia o están basados en prejuicios ideológicos o tópicos.
Es evidente que vivimos una profunda crisis financiera económica y de valores. Ante este panorama la gente busca líderes que marquen el camino a seguir. Obama, como presidente de Estados Unidos, la única gran superpotencia en pie, la que a la hora de la verdad marca las diferencias y es motor de progreso, suscita grandes expectativas. A eso hay que añadir un indudable carisma personal y una excelente y convincente oratoria.
El poder que dispone Obama, en virtud de su cargo y su personalidad, lo convierten en ese “Mesías” del que me habla para algunos, para aquellos que comulgan con su ideología, por supuesto; pero prefiero hablar de “líder”, creo que es algo más acertado.
Que sea la solución a todos los problemas, simplemente no es real. La situación sí va a requerir de su liderazgo, y lo estamos viendo, pero Obama no es la solución a todo, aunque sí una parte esencial. Esto no implica automáticamente que sus políticas vayan a ser la solución, eso es algo que se está dirimiendo ahora, deberemos esperar y ver si funcionan o no.
Cuando lleve más tiempo podremos determinar el alcance de su éxito o su fracaso.
Pienso que la clave estará en el equilibrio que logre entre un gobierno que contribuya a solucionar la crisis y un gobierno que no se convierta en intervencionista y derrochador. Ahí podemos encontrar la respuesta.
Tengo esperanza en que Obama sea parte de la solución, porque mi interés es que Estados Unidos siga prosperando, pero es algo que veremos en los próximos meses.
Su excesiva tendencia a tirar del gasto público, intervenir en el ámbito privado, y aumentar el déficit, es peligroso, y aunque tengo la convicción personal de que está yendo demasiado lejos en la cuestión del déficit, en este momento de crisis profunda lo puedo entender. Quizá dentro de un año, no. Hay que estar muy alerta sobre cómo evoluciona la situación.
Obama se está moviendo en esa zona crítica en la que puede convertirse en la solución o simplemente ser devorado por la crisis y empeorar la situación.
No soy de los que atacan siempre a un presidente elegido democráticamente sólo por estar en contra ideológicamente hablando o por tener diferentes planteamientos. El pueblo americano lo ha elegido y tiene la oportunidad de gobernar y de que le dejemos hacerlo. Habrá tiempo de pedirle cuentas o darle la razón, si fuera el caso, cuando llegue el momento, y con datos reales y objetivos en la mano.
H. Esperaremos pues, aunque me temo que lo que menos va a tener el Presidente Obama es tiempo… En España, como supongo que sabrá, se ha pretendido, desde ciertos medios de comunicación, vender la imagen de que Obama es el «Zapatero americano». ¿Cuales son en su opinión los parecidos, o las diferencias, entre ambos?

J. N. Sí, es cierto, conozco esos intentos de identificarlos. Me parecen patéticos y claramente manipuladores porque no se parecen en nada….o en muy poco.
Obama es carismático, un líder nato, capaz de adaptar sus puntos de vista o planteamientos si los argumentos le convencen. Su ideología no es estática.
Zapatero no tiene un plan de gobierno definido, ni nunca lo ha tenido. Obama, se esté o no de acuerdo con él, sí lo tiene y está implementando medidas para llevarlo a cabo.
Zapatero es torpe y obtuso, Obama es inteligente y astuto. Zapatero perjudica incluso los intereses de su país si con ello gana el Psoe o la camarilla que tiene alrededor. Obama podrá equivocarse o acertar, pero actúa con patriotismo, en interés de los Estados Unidos.
Zapatero te puede provocar dolor de cabeza al escucharlo, en el mejor de los casos. Obama usa una oratoria inspiradora, se puede compartir su contenido o no, estar de acuerdo ideológicamente o no, pero es un placer para los oídos, y está en la tradición de los líderes americanos.
Hay un sinfín de diferencias entre ambos. Sólo se me ocurre una cierta semejanza: la inclinación por ganarse la popularidad a cualquier precio.
Pero hasta en esto hay diferencias. Zapatero apela a los instintos más bajos, el revisionismo histórico constante, y la manipulación de la información de forma descarada. Obama trata de llegar a la gente apelando a sus preocupaciones y proponiendo soluciones.
En suma, Zapatero es un político mediocre, gris, y nada brillante. Obama es inteligente, sabe llegar a la opinión pública y convencer, aunque siga siendo el Comandante en Jefe de las mismas tropas que siguen en Iraq y Afganistán, y que defiende el liderazgo de los Estados Unidos en un mundo en el que todos conocemos el antiamericanismo galopante que anida en algunos sectores.
Se puede estar de acuerdo o no con Obama, pero es un presidente que despierta admiración y respeto. No creo que de Zapatero se pueda decir lo mismo.
Ideológicamente, también son distintos, y lo vamos a ir comprobando a medida que se desarrolle la presidencia de Obama. Ya hemos tenido algunas muestras en Afganistán y en las iniciativas emprendidas (acertadas o equivocadas…ése es otro debate) para salir de la crisis económica. Obama se mueve, Zapatero no.
H. Una respuesta contundente. No obstante le he de confesar que Obama no es santo de mi devoción. Bien, Sr. Nava, no sólo de política vive el hombre. Hablemos de su libro «Lobo gris». Las críticas son abrumadoramente positivas. Pero a mi me gustaría que usted me convenciera de que he de adquirir su obra. Así pues, Sr. Nava. ¿por qué deberíamos acudir en masa a la librería más cercana a adquirir su novela?.

J. N. Tampoco es santo de mi devoción, en eso coincidimos. Pero siempre he sido objetivo con los Presidentes norteamericanos, trato de valorarlos arreglo a sus políticas y objetivos cumplidos (o incumplidos), no en virtud de mis predilecciones ideológicas.
En cuanto a comprar “Lobo Gris”, le diré una razón para ello: cuando la lea sentirá que no ha tirado su dinero y le permitirá disfrutar de una novela entretenida, con la que aprenderá algunas cosas. En definitiva, una novela que podrá leer de un tirón y de la que disfrutará cada página.

H. Bien Sr. Nava hemos llegado al final de esta entrevista. Sólo una cuestión final. La Historia de España es probablemente una de las más prolíficas en personajes y hechos dignos de ser novelados. Me gustaría, para finalizar, que eligiera usted un personaje de la Historia de España al que le gustaría novelar su vida y que escogiese asimismo un lugar de España en donde escribir esa hipotética novela. (Si algún día lo hace recuerde quién le dio la idea).
Ha sido un placer entrevistarle.
J. N. Es cierto, es una historia muy rica en personajes y acontecimientos relevantes. Me atraen especialmente las historias de los conquistadores españoles en América: Cristóbal Colón, Pánfilo de Narváez, Hernando de Soto, Francisco Vázquez de Coronado, Alvar Núñez Cabeza de Vaca, Juan de Oñate, P. Eusebio Kino, Fray Junípero Serra, Juan Ponce de León… Sus historias son fascinantes y dan para muchas novelas.
Para ambientar en España, sin duda me atrae el Cid, en escenarios de Castilla, Valencia, etc.
También hay algunos episodios interesantes para ambientar novelas en la Guerra Civil española, y un personaje genial que me atrae y conozco bien: José Millán Astray y Terreros, el fundador de la Legión. A él sí lo haría protagonista de una buena novela.
Descuide, no olvidaré su contribución. Aunque debo serle sincero: es una idea que ya está en mi mente desde hace tiempo, si bien no la he plasmado aún porque tengo en marcha otros muchos proyectos.
Quizá algún día escriba esa novela.
Muchas gracias por sus interesantes preguntas. Ha sido un placer charlar con usted.