Detrás de la novedad editorial
Nos emociona a todos y hay que reconocerlo así: las novedades editoriales tienen esa magia de lo nuevo que nos hace soñar y nos ilusiona. Todos anhelamos las novedades editoriales para explorar entre los títulos, los autores y las sinopsis de los argumentos, abrimos los ojos llenos de expectación para descubrir esas portadas que nos abren a nuevos mundos.
Sin embargo, detrás de las novedades editoriales hay una historia de trabajo intenso, sudor y competencia brutal que nada tiene de romántica. El ciclo de las novedades editoriales es salvaje y despiadado. Tiene lugar cada año en determinadas fechas propicias para publicar y llenan palets de libros destinados a venderse o a acumular polvo, a triunfar o a morir en silencio.
Los grandes grupos editoriales, con decenas de sellos editores, inundan el mercado con cientos de libros que parten siempre con ventaja respecto a los libros editados por pequeñas editoriales independientes. Ese mar de novedades, de grandes y pequeñas editoriales, empieza con manuscritos originales escritos desde la pasión y el entusiasmo por sus autores, pasa por la criba de responsables editoriales, por profesionales de la edición a través de un proceso que los convierten en libros potencialmente comerciales. En muchos casos la competencia nace en el origen al tener que competir las editoriales por un manuscrito en subastas literarias donde los agentes ponen a la venta los derechos de libros de autores célebres, muchos de los cuales ni siquiera se han publicado aún.
El ciclo de la novedad incluye fases extenuantes de corrección literaria y de diseño de portadas, de planificar estrategias de marketing y promoción. Es todo aquello que los lectores apenas perciben, pero que está detrás de toda novedad editorial. El destino es el punto de venta, sea el que sea, una librería, un centro comercial, o una librería online, donde los lectores aún tienen la última palabra de esta historia al elegir o no esas novedades que se presentan en el gran escaparate literario y comercial.
Nada de todo lo anterior garantiza un éxito o que se venda bien un libro. Los factores que influyen son tan diversos que escapan al control del autor e incluso de la editorial, aunque en el caso de los grandes grupos editoriales juegan con ventajas que siempre les garantizan algunos éxitos.
El ciclo de novedades editoriales es tan brutal en la actualidad que apenas se tienen unas semanas, a veces incluso días, para saber si un libro triunfa o queda relegado al olvido. Romper con esa dinámica salvaje que han impuesto las grandes editoriales con cientos de novedades editoriales que saturan el sistema y a los lectores, no es nada fácil. De hecho, apenas algunas editoriales independientes, como Sniper Books, rompemos ese ciclo y lo pausamos para hacerlo racional.
A todos nos encantan las novedades editoriales, pero ese ciclo bestial que imponen los grandes grupos editoriales lanza al mercado demasiada basura encuadernada para que merezca la pena mantenerlo. Menos novedades, pero de más calidad beneficiaría a todos: lectores, editoriales y autores.