Día de la Tierra – 2013
Desde Estados Unidos siempre se han liderado los movimientos que han marcado el progreso de la humanidad, a veces mediante gestos voluntarios que se extienden globalmente.
Este 22 de abril se celebra en todo el mundo el Día de la Tierra, una jornada para reflexionar acerca del medio ambiente, concienciarnos sobre la importancia de los ecosistemas naturales y los desafíos que tenemos por delante en esta materia.
Esta celebración se llevó a cabo por primera vez el 22 de abril de 1970, impulsada por el senador estadounidense Gaylord Nelson con el objetivo de extender una moralidad y una ética basada en el respeto y el cuidado del medio ambiente. Se trata de concienciar a la sociedad mundial acerca de distintas problemáticas que aquejan a la Tierra para encontrar soluciones entre todos.
Al principio, se unieron alrededor de dos mil universidades, diez mil escuelas primarias y centenares de comunidades, que lograron consolidar un movimiento que fue el origen para la creación de la Enviromental Protection Agency (EPA), que es la encargada del estudio y análisis del medio ambiente y la adopción de las medidas necesarias para su conservación y recuperación en EE. UU.
Desde aquella fecha, y ya con respaldo de las Naciones Unidas, se reconoce el 22 de abril como el Día de la Tierra, en el que cobran protagonismo las necesidades medioambientales de ahora y de las generaciones futuras, haciendo hincapié en los recursos naturales de que disponemos a fecha actual y cómo conservarlos y obtener un mejor aprovechamiento de ellos sin necesidad de agotarlos.
Este año volverán a ser centro de atención cuestiones que requieren de la adopción de medidas urgentes, como la contaminación originada por el ser humano y la provocada por causas naturales; la biodiversidad, su conservación, conocimiento, análisis y protección de los ecosistemas; la superpoblación del planeta, y cómo podemos poner orden en su crecimiento y mejorar la relación entre los recursos disponibles y la población que tiene acceso a ellos, su mejor aprovechamiento, etc; la extinción de especies, y las medidas que debemos adoptar para su conservación; entre otras problemáticas acuciantes.
Es un día para concienciarse y cambiar el mundo mediante la unión de pequeños gestos individuales. No son precisas grandes medidas institucionales o de los gobiernos, tan sólo la movilización real de los ciudadanos en todo el mundo. Ése es el origen del Día de la Tierra, una iniciativa estadounidense que ya es global y que puede contribuir a mejorar hábitos de consumo y de conservación de la naturaleza mediante la acción de millones de comportamientos en todo el planeta.
Es un día importante para la reflexión personal y para responsabilizarnos de nuestros actos y de cómo impactan en la sociedad y en el mundo en el que vivimos. Un día para mejorar individual y colectivamente como sociedad y como planeta.