Trump: hombre del año 2018
Lo ha vuelto a hacer. Trump se ha convertido de nuevo en 2018 en el hombre del año. No ha sido fácil porque los medios y la prensa progre, así como el establishment, han conspirado y aunado fuerzas para detener las políticas del presidente y arruinar su imagen pública.
Aun con todo en contra, salvo el apoyo leal de sus votantes, que son millones de ciudadanos estadounidenses, Trump ha logrado que este segundo año de presidencia sea un éxito. Uno de los indicadores más precisos apunta que el 75% de los ciudadanos está satisfecho con la marcha de la economía del país bajo la presidencia de Trump. Eso se traduce en un apoyo masivo al presidente. Ni NeverTrumpers, ni medios anti Trump, ni periodistas rabiosos por el éxito de las políticas conservadoras del presidente, ni demócratas traidores, ni republicanos sólo de nombre. Nadie ha podido derribar a Trump, que enfila la mitad del primer mandato presidencial con un bagaje francamente positivo y más del 70% de la agenda MAGA ya implementada.
Cuando estamos a punto de despedir 2018, la Casa Blanca de Trump se está preparando con intensidad para alcanzar nuevos e importantes objetivos en política nacional e internacional. 2019 va a ser un año decisivo para el presidente, por eso la reorganización interna del gabinete es una prioridad durante estas semanas.
En el tercer año de presidencia, 2019, vamos a ver cómo se sigue desinflando la investigación por la inexistente trama rusa que ha estado llevando desde hace más de un año y medio el equipo del fiscal especial Robert Mueller, en la que ha dilapidado más de 25 millones de dólares para nada. Lo único que ha salido en claro es que no hubo injerencia rusa en las elecciones y los demócratas han quedado en ridículo.
Más importante que las causas judiciales en marcha, que son armas arrojadizas políticas sin fundamento alguno, tenemos temas como la inmigración ilegal y la seguridad en la frontera que sí plantean retos reales y requieren de nuevas medidas. La cohabitación con el Congreso será otro de los puntos decisivos en 2019, especialmente con la Cámara de Representantes en manos demócratas y sus iniciativas políticas alocadas.
Trump deberá mantener la firmeza esgrimida hasta ahora ante China, Rusia y la Unión Europea, en aras de un comercio más justo y equilibrado. La relación con Arabia Saudí centrará el interés en torno al petróleo y la seguridad en Oriente Medio. Asimismo, las nuevas estrategias militares, con el repliegue de tropas de Siria y Afganistán, y operaciones especiales limitadas y estratégicas contra objetivos concretos, ocuparán parte de los próximos meses.
La economía, el empleo y los veteranos seguirán centrando gran parte de los esfuerzos de Trump en el ámbito nacional. La estrategia para encarar la reelección en 2020 también ocupará un papel central. Si las negociaciones con el Senado y la Cámara de Representantes llegan a buen puerto, habrá otra rebaja de impuestos importante. Y se seguirá atrayendo capitales del exterior, al igual que este año, lo cual permitirá hacer inversiones estratégicas en sectores clave de la economía nacional.
Trump ha vuelto a ser el hombre del año en 2018 gracias a un trabajo extraordinario y a su esfuerzo personal y al de su equipo en aras de resultados positivos para el pueblo americano. Afrontamos 2019 con esperanzas renovadas y mucho camino recorrido, pero con nuevas metas que alcanzar.
El entusiasmo y el optimismo del presidente Trump empujan a Estados Unidos por una senda de prosperidad y fortaleza que se verá con envidia y nostalgia en unos pocos años más. Entretanto, 2019 nos espera para seguir habiendo historia americana.