MAINGATE – Nueva Red Militar
Uno de los aspectos que siempre nos ha ocupado en los despliegues militares, ha sido la comunicación entre las fuerzas desplegadas, vital para la consecución de objetivos y el desarrollo de las estrategias. En los últimos años las comunicaciones han cobrado, si cabe, mayor protagonismo en los despliegues de Afganistán e Irak, para cubrir a todos los actores sobre el terreno: ejércitos y empresas de seguridad privadas.
La experiencia nos ha demostrado que muchas veces la incompatibilidad de tecnologías o la inexistencia de comunicaciones fiables, pone en riesgo algunas operaciones y misiones.
Si en el pasado el Pentágono, a través de su agencia de investigación y desarrollo, DARPA, ya realizó una contribución importante con la creación de la red ARPANET, que derivaría en Internet, y que luego se extendería para uso de toda la población civil, ahora da otro paso de futuro esencial con la puesta en marcha de la nueva red denominada “Gateway de red inter-operable móvil a ad-hoc” (MAINGATE), contratada por DARPA a la empresa Raytheon para su desarrollo desde 2009. Se trata básicamente de una red móvil de comunicaciones que las organizaciones civiles y militares pueden usar para comunicarse a través de cualquier radio o dispositivo inalámbrico. Los últimos avances de MAINGATE han hecho posible usar el sistema con vídeo, voz y datos tanto a través de conexiones de banda ancha como de escasa capacidad. Una aplicación revolucionaria que coloca a las fuerzas militares estadounidenses con capacidades de comunicación en vanguardia, exclusivas y que nos confieren una herramienta de enorme poder a la hora de realizar despliegues militares más efectivos.
Esta nueva red de comunicaciones tiene unas prestaciones asombrosas y uno de los elementos claves es el Sistema de Radio de Red Central (NCRS), que otorga a MAINGATE una arquitectura de radio que permite redes de IP versátil y una gateway que posibilita que los sistemas análogos y digitales sean enlazados. Así, NCRS permite las comunicaciones entre prácticamente cualquier radio, algo que abre un amplio abanico de posibilidades para un despliegue militar y, en realidad, para cualquier tipo de comunicaciones, lo que abriría interesantes opciones en el campo civil, como las emergencias médicas, para equipos de rescate, policía, bomberos, etc.
Las necesidades en el combate moderno requieren cada vez más de excelentes comunicaciones móviles, de ahí que las fuerzas armadas estadounidenses, quienes soportan realmente el peso internacional de las intervenciones y despliegues militares, estén en un proceso de investigación y equipamiento de modernos sistemas de comunicaciones móviles. Por ejemplo, la distribución entre todo el personal del ejército de smartphones como el iPhone 4, entre otros dispositivos avanzados, como las tablets iPad 2, que algunos defendemos como equipamiento tan necesario como las más modernas armas.
Además, el ejército cuenta ya con su propia tienda de aplicaciones móviles, a inaugurar en agosto, destinada a las tropas, que podrán acceder a recursos muy útiles, como el rastreo de soldados amigos, guía de misiles, trazado de mapas sobre el terreno o traducción de lenguas, entre otras aplicaciones con fines militares exclusivos. También cuenta con un elemento de crowdsourcing, de decir, una plataforma diseñada para apoyar la generación de ideas y mejoras. De esta forma, el Smartphone se podrá usar en escenarios bélicos y pasaría a ser un complemento más del equipamiento del soldado.
Así, los avances tecnológicos estadounidenses, que han sido una constante en las últimas décadas, bien sean impulsados por la investigación militar o civil, se retroalimentan. DARPA puede contribuir de nuevo con MAINGATE a revolucionar las comunicaciones y la tecnología, pero también las nuevas aplicaciones de comunicación móvil de carácter civil están ayudando a las fuerzas armadas a incrementar sus prestaciones y efectividad, llevando las comunicaciones móviles a los escenarios de guerra.