En el Medio Oeste
John McCain no quiere tirar la toalla en esta contienda electoral. Lo ha demostrado con su visita a Cedar Falls, Iowa. Sarah Palin ha completado la gira por el Estado con sendas visitas a Sioux City y Des Moines. Esto encaja en la estrategia Republicana de pelear hasta el final en todos los Estados donde aún hay miles de votos indecisos y, por tanto, esperanzas para ganarlos. Un empujón en áreas estratégicas de Iowa podrían decantarlo del lado de McCain. Está difícil, pero el veterano Senador sigue demostrando que lucha hasta el final y que esta contienda aún no está terminada.
Barack Obama también ha visitado el Medio Oeste, concretamente Canton, Ohio, donde ha empezado sus closing arguments, los argumentos o conclusiones de cierre de los temas que han ocupado su campaña electoral. El Senador que ha revolucionado la política a nivel de mass media y opinión pública mundial, está centrando sus argumentos finales en recuperar el progreso económico y lograr la unidad del pueblo americano en torno a objetivos de interés general.
El Demócrata está concentrado en repetir una y otra vez en estos últimos días de campaña las ideas netamente americanas de fe en el futuro y de esperanza en mejorar la situación y las vidas de todos. Su concepto de cambio impregna su discurso, consciente de que cala hondo en este momento de crisis, y que eso puede darle la Presidencia, pese a todas las dudas que pudiera tener la clase media, precisamente la que determinará el resultado final.
Su estrategia electoral es inteligente, pero el electorado norteamericano, dinámico y cambiante, aún está sujeto a mil variables distintas. Apenas unos miles de votos, por ejemplo, en Ohio, pueden poner el estado y la Presidencia en manos de McCain, que sigue cosechando avances en otros swing states, como New Hampshire, Pennsylvania, Florida, Virginia o North Carolina.
Que sean avances suficientes para provocar la sorpresa que casi nadie espera el 4/N, sólo lo sabremos verazmente la noche electoral.