El poder industrial estadounidense siempre ha tenido en el sector automovilístico un fuerte pilar, a cuyo alrededor se ha vertebrado la pujanza económica de las comunidades, dando trabajo y dinamizando el consumo.
La inversión de las empresas estadounidenses en el propio territorio nacional ha sido una de las claves para la prosperidad del sector y su incidencia en el PIB. Por eso es tan importante la noticia de que General Motors, uno de los grandes grupos automovilísticos a nivel nacional y mundial, invertirá alrededor de 332 millones de dólares (259,3 millones de euros aproximadamente) en cuatro plantas en Estados Unidos, que se dedicarán a la producción de motores y transmisiones más eficientes.
Esta decisión pone de relieve el compromiso de la multinacional con sede en Detroit, Michigan, para entregar a los clientes una mejor tecnología y mayor eficiencia en el consumo de combustible. Esta importante inyección económica irá para las instalaciones de Flint y Bay City (Michigan), de Toledo (Ohio) y Bedford (Indiana) y se destinará a la fabricación del nuevo propulsor de gasolina Ecotec, de un motor V6 nuevo, de una caja de cambios de ocho marchas y a la adaptación de instalaciones para montar la actual transmisión de seis velocidades.

Además, General Motors ha aumentado en 46 millones de dólares (36 millones de euros), hasta 646 millones de dólares (504 millones de euros), la inversión comprometida en los centros de Romulus y Saginaw (Michigan) para fabricar una nueva mecánica V6. Desde el año 2009 la empresa está destinando 1.800 millones de dólares (1.406 millones de euros) en seis plantas dedicadas al montaje de motores. Son inversiones estratégicas que persiguen producir vehículos y componentes eficientes y de alta calidad. Algo imprescindible para seguir compitiendo en el mercado y que permite crear nuevos empleos. De nuevo General Motors se configura como un referente en la forma de hacer las cosas con inteligencia. Así, la compañía que preside Dan Akerson se permitirá mantener los 1.650 puestos de trabajo que hay en los centros de Flint, Bay City, Toledo y Bedford, y en las instalaciones de Romulus y Saginaw.