En estas elecciones presidenciales de 2024 en Estados Unidos hay varios temas que ocupan el interés de los ciudadanos por las graves consecuencias de las desastrosas políticas socialistas de Joe Biden y Kamala Harris estos tres años y medio. La economía, la inflación, el empleo, la seguridad, la criminalidad y la inmigración ilegal, que afecta a todo lo anterior de forma muy negativa, centran las preocupaciones ciudadanas. Donald Trump ha sabido captar esta inquietud y ofrecer excelentes soluciones que están calando en la sociedad estadounidense.
Veamos algunos ejemplos de estos temas que están impulsando a Trump a ganar las elecciones. Las vacantes de empleo han caído a su nivel más bajo desde que Biden y Harris asumieron sus cargos en enero de 2021 y empezaron a imponer sus desquiciadas políticas socialistas. Así, medio millón de puestos de trabajo vacantes se evaporaron de la noche a la mañana. Esto señala enormes problemas para el mercado laboral. Con sólo 7.670.000 vacantes en julio, frente a más de 12 millones en marzo de 2022, está claro que las políticas económicas de Biden y Harris han enfriado el mercado laboral más rápido de lo esperado. Por no hablar de su falseamiento de las cifras de empleo. Los estadounidenses perdieron 1.300.000 empleos en un año (Heritage Foundation). El último informe sobre empleo revela la realidad: la economía socialista de Biden y Harris está canalizando empleos hacia trabajadores inmigrantes ilegales mientras que los estadounidenses se quedan sin ellos. Con más de 1.200.000 empleos destinados a inmigrantes y 1.300.000 estadounidenses que abandonan la fuerza laboral, está claro que las políticas de Kamala Harris perjudican a los trabajadores estadounidenses. Las agresivas alzas de tasas de la Reserva Federal, propiciadas por la Administración demócrata, también han contribuido a ello. La elección de Kamala Harris marcaría una caída aún mayor del mercado laboral y afrontaríamos un panorama sombrío rumbo a una enorme recesión.
En cambio, el completo plan económico de Donald Trump, “Make America Affordable Again” (Hacer que Estados Unidos vuelva a ser asequible), incluye una batería de medidas excepcionales que harían prosperar de nuevo a la sociedad y al país, tales como reducir la tasa de impuestos corporativos al 15% para las empresas que producen sus productos en los Estados Unidos, lo que generaría empleos en este país en vez de enviarlos al extranjero; el impulso a la producción energética nacional; la utilización de las sanciones comerciales para garantizar que el dólar estadounidense conserve su lugar como moneda de reserva mundial; la construcción de proyectos de desarrollo nacional extraordinarios, desde carreteras hasta aeropuertos y la infraestructura de transporte del futuro; la creación de una Comisión de Eficiencia Gubernamental para eliminar burócratas federales, regulaciones innecesarias y reducir el tamaño del gobierno; revertir regulaciones y rescindir fondos no gastados de la Administración Biden / Harris; la creación de un fondo soberano de riqueza como el que tienen en Dakota del Norte, donde los ciudadanos se encuentran entre los más ricos del país; etc. En resumen, Trump impulsará de nuevo una clase media más fuerte, con millones de empleos bien remunerados en manufactura, transporte, defensa, entre otros sectores, y un renacimiento económico nacional.

La inmigración ilegal permitida por Joe Biden y Kamala Harris se ha desbordado con su política de fronteras abiertas y cero seguridad. Con la entrada de estos inmigrantes ilegales, han llegado miles de criminales y también terroristas sin ningún control. Además de negarse a asegurar la frontera, Biden y la fracasada zar fronteriza, Kamala Harris, se niegan a deportar a prisioneros inmigrantes ilegales peligrosos una vez que son liberados de prisión, tal y como confirman numerosos fiscales, entre ellos la fiscal general de Florida, Ashley Moody, que ha emprendido acciones legales contra la Administración Biden / Harris acusándola de no deportar a inmigrantes ilegales delincuentes y de obstruir la transparencia. La demanda de Moody pone de relieve las desastrosas políticas de apertura de fronteras de Biden y Harris, que han llevado a que delincuentes peligrosos sean liberados en las comunidades estadounidenses, donde están provocando gravísimos problemas de delincuencia, criminalidad, robos, violaciones, robo de mascotas y animales, y altos niveles de inseguridad ciudadana. La negligencia de Biden y Harris ha provocado caos, incluidos incidentes recientes en los que miembros de pandillas han tomado el control de barrios estadounidenses. Esta acción pone de relieve los problemas más amplios de la gestión de la Administración en materia de inmigración y seguridad pública. Kamala Harris sólo quiere complacer a las élites corporativas y financieras con una oleada de inmigrantes ilegales continua sin control que garantice la mano de obra barata.
Sólo Donald Trump plantea soluciones a estos desafíos. Por ejemplo, realizará una de las deportaciones de inmigrantes ilegales más grandes de la historia de este país; protegerá a los trabajadores estadounidenses y reducirá el flujo de mano de obra barata que mantiene los salarios bajos. Con Trump en la Casa Blanca, tendremos una frontera segura, impediremos la inmigración ilegal, combatiremos la inflación, implementaremos recortes de impuestos, mejoraremos la educación y haremos que Estados Unidos vuelva a ser próspero, seguro y saludable.