Uno de los fenómenos pictóricos más genuinamente americanos es el de las pin-ups, una modalidad artística intrínsecamente americana que gozó de enorme popularidad en décadas pasadas, y que ahora de nuevo suscita el interés del público. Es una corriente con artistas de enorme talento, colorida, dinámica, y muy vital; artistas muy destacados que han elevado el género a la categoría de arte. Su valor artístico y económico ha crecido de forma espectacular. Por ejemplo, los cuadros y dibujos que en 1996 podían adquirirse por 2.000 dólares, se venden hoy por un mínimo de 200.000 dólares. 
El arte de las pin-ups tiene una base sencilla pero muy efectiva: mujeres pícaras o inocentes ligeras de ropa, a veces más que ligeras, y tuvo sus décadas de efervescencia entre 1920 y 1970; aunque nunca ha dejado de producir buenos cuadros y ahora vive una nueva explosión de talento. En su época de oro, editores e impresores de calendarios frecuentemente se deshacían de los originales una vez eran publicados, y actualmente el interés por estos originales es enorme, y se paga a precio de…oro (lo ha acertado).

La editorial Taschen se suma a este renacimiento con un libro para coleccionistas y sibaritas de chicas alegres y ligerillas de ropa con el libro The Art of Pin-up, imprescindible en toda buena biblioteca, no sólo por su contenido vistoso sino porque es un libro editado con enorme calidad. En él se incluyen descripciones minuciosas de diez artistas de esta corriente artística. La calidad de reproducción de los cuadros, pinturas al pastel y esbozos preliminares (reproducidos en gran parte a partir de los originales) es envidiable e invita al lector a repasar cada pincelada de las imágenes, presentadas a toda página. Cada capítulo incluye exquisitos calendarios de época, grabados vintage y fotos originales de las modelos que documentan el proceso creativo. Muchas de estas piezas efímeras fueron fotografiadas directamente en las instalaciones de la histórica Brown & Bigelow Company, que alberga el mayor archivo de calendarios pin-up de época.

El libro se completa con una «enciclopedia pin-up» que recoge biografías abreviadas y ejemplos de la obra de otros 85 ilustradores. Ha sido editado por Dian Hanson, que produjo diversas revistas para hombres entre 1976 y 2001, como Juggs, Outlaw Biker y Leg Show, antes de convertirse en editora de la colección Sexy Books de TASCHEN. Entre sus más de 60 libros para la editorial se incluyen The Art of Pin-Up y Psychedelic Sex; y los autores colaboradores con Sarahjane Blum, historiador cultural y copropietario de Grapefruit Moon Gallery, que está especializada en ilustraciones americanas originales de arte, y Louis Meisel, propietaria de una de las más antiguas galerías de arte de ilustraciones pin-up.
Les dejo una colección de ilustraciones que he seleccionado para que las disfruten. Las ilustraciones, quiero decir. Pero las chicas también se pueden disfrutar, no está reñida una cosa con la otra.
Arte elegante y muy sugerente.