Donald Trump está enfocado en los temas que más les importan a los ciudadanos, ofrece soluciones reales y por eso va camino de ganar estas elecciones presidenciales. Sus mensajes de campaña en estas últimas semanas se centran en ello con insistencia porque son los que resuenan más alto entre los votantes. Impuestos, inmigración, manufactura, comercio internacional y una defensa nacional fuerte. Estos son los ejes sobre los que Trump apoya su más que probable victoria.
¿Por qué los ciudadanos responden positivamente? Es fácil. Una inmensa mayoría estamos hartos de las mentiras de los demócratas y de sus políticas socialistas desquiciadas. En cambio, Trump ofrece reducir los impuestos, bajas regulaciones, bajos costes de energía, bajas tasas de interés y baja inflación para que todos puedan comprar alimentos, automóviles y casas. Es decir, realizar el sueño americano sin dejarte la vida en ello. Además, Trump detendrá la invasión de inmigrantes ilegales, pondrá fin a los crímenes y la delincuencia asociados a esta inmigración, fortalecerá nuestras fuerzas armadas, construirá un escudo de defensa contra misiles enemigos, mantendrá la Teoría Crítica de la Raza y la locura transgénero fuera de nuestras escuelas, y mantendrá a los hombres fuera de los deportes femeninos.
Mientras que los demócratas impulsan todo eso con políticas desastrosas que destrozan las comunidades, las fábricas y las familias, Trump es garantía de llevar al país y la sociedad por el camino correcto. Sólo Trump se compromete a defender la Segunda Enmienda, proteger la libertad religiosa, restablecer la libertad de expresión, ahora amordazada por los demócratas y sus esclavos en los medios, y asegurar la integridad de nuestras elecciones. Elegir a Trump se ha convertido en una necesidad nacional por el bien de nuestras familias, de los niños, de la economía, de la democracia y del país. Si los ciudadanos estamos luchando con Trump por salvar Estados Unidos, podremos restaurar lo mejor de este país y volver a hacerlo grande, unido, próspero y referencia mundial de las oportunidades y las libertades, y no de las idioteces woke con las que la izquierda nos tiene acostumbrados en los últimos años.
Como repite Trump a menudo, estamos al borde de los cuatro mejores años en la historia de este país. Con la victoria el 5 de noviembre, vamos a redimir la promesa de Estados Unidos y desbloquear el futuro extraordinario que está a nuestro alcance si sabemos elegir a la persona adecuada para el cargo de presidente. Con Trump en la Casa Blanca. comenzaremos una nueva era de riqueza y del fortalecimiento de una clase media en auge que volverá a ser la columna vertebral de la nación. Si elegimos a Donald Trump, elegiremos una economía mejor, vivir en ciudades y pueblos seguros y limpios, con fronteras seguras, y recuperar unos Estados Unidos mejores, fuertes, confiados y más libres. Los ciudadanos merecemos un país con grandes oportunidades y un potencial de crecimiento ilimitado; un país del que volver a estar orgullosos y en el que brindar una vida mejor a todos. En suma, merecemos un gobierno que proteja y respete a sus propios ciudadanos, que defienda su soberanía, su seguridad, su dignidad y su libertad; merecemos tener a Donald Trump como presidente otra vez.